Raúl Costilla Prieto nació en Zamora en 1972 y es ingeniero agrónomo. Actualmente es consejero delegado de MAPFRE Vida y director general Comercial y de Desarrollo de Negocio de MAPFRE IBERIA.
Se incorporó a MAPFRE hace más de 20 años y ha ocupado desde entonces puestos de creciente responsabilidad en la compañía, con interesantes experiencias en la organización territorial en España, en central y también a nivel internacional, como CEO de MAPFRE Puerto Rico, entre otras.
El 1 de enero de 2021 MAPFRE incorporó el Canal Corredores a la dirección general comercial al frente de la que se sitúa Raúl, incidiendo en su apuesta por la multicanalidad, y con el objetivo de aprovechar las sinergias entre los diferentes canales de distribución y potenciar la relación con los corredores.
Para que conozcas un poco mejor a la persona que está detrás del cargo, le hemos pedido a Raúl que responda a nuestro Who is who y que comparta con nosotros su visión del canal corredores y su futuro. ¡No te lo pierdas!
Como muchos por casualidad y, en mi caso, gracias a un anuncio en prensa donde MAPFRE buscaba titulados superiores “sin experiencia”. Sin conocer mucho de MAPFRE, pero recién licenciado de la carrera y del servicio militar y en una época complicada laboralmente (1996), todo sonaba bien para presentarme.
Tras un periplo intenso de pruebas y un periodo de 3 meses de “formación selectiva” en Oviedo, entré en MAPFRE en 1997 en mi ciudad natal, Zamora, más específicamente en MAPFRE AGROPECUARIA como técnico comercial. Con ello también le daba algo de uso a mi formación. Ahí comenzó todo, hace casi 25 años.
Creo que MAPFRE cuenta con una marca conocida y, sobre todo, reconocida y con gran reputación. Evidentemente, esto es el resultado de muchos años de buen hacer, tanto desde la perspectiva del servicio a cliente como de productos, innovación, confianza de los canales de distribución y, especialmente, en los últimos años, capacidad de adaptación al entorno, digitalización y transformación de la compañía.
Tampoco podemos olvidarnos del compromiso social, que en MAPFRE siempre ha estado muy presente tanto para apoyar a la sociedad en la que desarrollamos nuestros negocios como, por supuesto, a las personas que forman parte de esta empresa.
Evidentemente, esas capacidades y fortalezas están ahí, pero nos esforzamos cada día en seguir mejorando para continuar siendo la compañía aseguradora de referencia en España.
No hay algo único. Son muchos factores como los que mencionaba anteriormente, pero por destacar alguno, la cultura MAPFRE, los valores, la apuesta por las personas, la capacidad de transformarse y de avanzar en los entornos más diversos y complejos hacen que cada día nos sintamos muy orgullosos de la empresa.
Tengo unas expectativas muy positivas, tanto por los cambios que se han producido en el Área como por la esperanza de que vayamos dejando atrás la pandemia y sus terribles efectos. Creo que tenemos la estructura y las herramientas adecuadas y, por supuesto, hemos formado un equipo magnífico, con capacidades y conocimientos que se complementan y que nos va a llevar a crecer y lograr nuestros objetivos.
Es un entorno complejo, en lo social, en lo sanitario y en lo económico, pero creo que podemos ser el socio ideal para poder avanzar en este contexto y aprovechar las oportunidades que seguro surgirán.
Nuestro objetivo en MAPFRE siempre es claro: seguir creciendo, en todos los ramos, canales y mercados, y hacerlo con rentabilidad. Esto además es uno de mis grandes objetivos en mis nuevas responsabilidades en MAPFRE VIDA. Creo sinceramente que podemos y debemos ser también la referencia en soluciones de ahorro periódico, soluciones senior o longevidad, proporcionando además un abanico de soluciones de ahorro y previsión diferenciales.
Así que, un reto apasionante. Y en ello estamos.
Como he dicho antes, MAPFRE es una gran compañía, que aporta solvencia, innovación, magníficos productos y una gran calidad en la atención. Somos conscientes de lo que implica que nos confiéis un cliente y queremos estar al lado del vuestro para ayudaros a preservarle y a que crezcáis con él. Somos muy escrupulosos con la gestión de la multicanalidad y creemos que además podemos ayudaros en desarrollo de estrategias de cliente, en digitalización e innovación y en crecer en nuevas líneas de negocio. Creo que es una oportunidad para todos y queremos aprovecharla de vuestra mano. Todo ello, con la máxima transparencia con vosotros.
Esa apuesta por los corredores se materializa en una propuesta de valor y soporte diferencial para todos vosotros: oficinas específicas para el canal, más de 200 personas para su atención exclusiva, herramientas digitales como nuestro Portal Corredor, hecho para el corredor y, lo que es más importante, con el corredor… Ahora, además, hemos puesto a su disposición el universo de servicios del programa de fidelización MAPFRE teCuidamos, para que sus clientes también se puedan beneficiar del mismo cuando así lo considere el corredor. También estamos haciendo un gran esfuerzo para mejorar la comunicación con el canal, esta newsletter es un claro ejemplo.
Creo que hay un elemento claro que hemos acabado de asimilar con esta crisis: la necesidad de la digitalización. Es fundamental avanzar para poder contar con las herramientas necesarias en este entorno, para poder gestionar la relación con el cliente, en definitiva, para progresar y tener un futuro sostenible. Ya no es una cuestión de futuro, sino de presente. Por eso mi recomendación para el canal -y realmente para todos- es que inviertan, se formen y se esfuercen en digitalizarse, porque es una cuestión de supervivencia.
Y, por supuesto, que busquen un buen compañero de viaje, compañías sólidas, estables, sostenibles, que sean capaces de proporcionarles los productos, servicios y la atención que necesitan sus clientes.
Espero poder volver a retomar muchas de mis costumbres de antes, sobre todo en el aspecto social, poder estar de nuevo cerca de las personas, darnos la mano, un abrazo, viajar con regularidad… ¿Qué quedará? Como comentaba antes, la digitalización es algo imparable, por lo que probablemente seguiremos utilizando la tecnología para mantener muchas reuniones, trabajaremos más con herramientas colaborativas, la visión y estrategia de clientes…
Pero quiero creer que mi vida personal, a grandes rasgos, seguirá siendo muy similar a la de antes. Lo que es seguro, es que valoraré mucho más los aspectos cotidianos de la vida, que antes pasaban desapercibidos o no se valoraban lo suficiente.
Primero, que sea consciente de que está en un sector clave para la actividad económica, pero lo que es más importante, que nos dedicamos a ayudar a las personas cuando lo necesitan. Creo que hay pocas profesiones como esta.
También, que es un sector muy exigente, tanto por lo competido que es como por las demandas del consumidor o las exigencias regulatorias. Esto requiere formarse y capacitarse, estar en permanente evolución, no solo de nuestra propia actividad, sino también de todas las que al final tienen necesidades. Debe apostar por la innovación y abrazar las soluciones que ayuden a transformar su actividad.
Y le recomendaría también que no se olvide de mantenerse muy cerca de su cliente, conocerle bien, acompañarle… porque el servicio al cliente es la razón de ser del seguro.
“Ver oportunidades en cada dificultad, en lugar de ver dificultades en todas las oportunidades”.
Y, por supuesto, “que la suerte te pille trabajando”.